C.E.I.P. Sacratif

Después de pasado un año desde la visita de la Delegada de Educación a nuestro Colegio junto al alcalde pedáneo, las goteras habían ido a más (no se había hecho nada) y el pasado dia 17 de enero hicimos un nuevo escrito pidiendo soluciones, escrito del que se mandó copia a la Delegada, al Inspector, al ISE y al alcalde pedáneo. Pero, sin dar tiempo ni a esperar respuesta al mismo (suponiendo que las haya), el pasado jueves vimos con sorpresa que una nueva clase estaba ya afectada; la pudo ver el Sr.Inspector en persona ya que ese dia recibimos su visita y de inmediato se hizo un nuevo escrito que se mandó de nuevo a todos los organismos, el lunes se trató en Consejo Escolar y hoy lo hacemos público para el conocimiento de todos.

A continuación insertamos el escrito enviado a la ELA pero, una vez más, como es pequeña la imagen y no se puede leer bien,transcribimos a continuación su contenido, que es el siguiente:

El pasado 17 de los corrientes se le envió un escrito pidiendo soluciones a las goteras que, le comentábamos, iban en aumento (le adjuntamos dicho escrito como Anexo I), y hoy me veo en la urgencia de enviarle un nuevo escrito porque ayer por la mañana al entrar a clase a las 8.30 cual fue nuestra sorpresa cuando al entrar en la nueva aula de 1º de ESO (se les cambió a este aula porque la que tenían originariamente ya tenía dos goteras y decidimos utilizarla para aula de Refuerzo, con menos alumnos), pues esta otra aula apareció con varias goteras a la altura de la mesa del profesor y primera fila de mesas (a la altura también de la pizarra electrónica y cañón de video), que dejaban salir agua de forma bastante considerable (se adjuntan fotos como anexo II).

En ese mismo instante lo comunicamos por teléfono al Ayuntamiento pedáneo pidiéndoles que viniesen y comprobasen por ellos mismos la importancia de dichos recalos, comunicación que no tuvo efecto alguno porque nadie acudió al Centro a comprobar nada ni se nos dió ninguna respuesta al tema.

Poco después recibimos la visita del Sr. Inspector de Zona, D. Antonio Caballero, que pudo comprobar la magnitud creciente del problema y nos dijo que iba a hacer un informe ya que la consecuencia directa es la necesidad de utilizar nuevos espacios para dar la clase, en este caso ya el salón de actos que tendría como prioridad esa función y que el director informara hoy también por escrito a las autoridades y organismos pertinentes.

A todo ello se une, cada vez con más frecuencia, los cortes de luz en la planta superior posiblemente debida a las humedades que hacen que cuando esto ocurre no podamos utilizar ni ordenadores ni pantallas ni luz de alumbrado ni calefacción, además del potencial potencial peligro que nosotros desconocemos por no ser técnicos en esa materia.

Con esta misma fecha enviamos copia de este escrito a la Sra. Delegada de Educación, al Sr. Inspector de Zona y al ISE.

El Director

Firmado: Bernardo Roa Guzmán

La pasadas semana apareció, en manos de una niña pequeña, una jeringuilla que se había encontrado en el patio, cerca del columpio: de inmediato escribimos a la ELA  pidiendo soluciones al mal uso del patio los fines de semana. Nos parece muy serio el tema y creemos que todos deben estar informados.

Aqui tienen el escrito enviado a la ELA y la foto de la aguja encontrada.

Como no se puede leer bien por su tamaño, el contenido del escrito es el siguiente:

«Ya hace algún tiempo que venimos observando que en el patio del colegio vienen apareciendo restos de los ratos de descanso que otros se pasan en nuestro patio siempre que quieren, sobre todo los fines de semana, cuando el colegio está cerrado y no dudan en saltar las vallas (tanto chicos como chicas) y practicar aquí, en nuestras instalaciones, deporte (cosa que es hasta lógica porque no tienen donde hacerlo fuera del colegio desde que el pabellón cubierto permanece habitualmente cerrado) pero, además, el deporte va acompañado de alcohol y otras bebidas, cuyos envases dejan tirados en el patio, a veces rotos.

Son varios ya los lunes que hemos tenido que recoger cristales del patio para evitar que nuestros alumnos (los niños de nuestro pueblo, los más indefensos) se puedan herir.

Pero ya el colmo ha sido el pasado martes cuando, durante el recreo, una alumna de los cursos pequeños (de 1º de Primaria) fue a enseñar a la maestra lo que se había encontrado en el trozo que hay recortado con un columpio para los más pequeños del colegio grande; no era ni más ni menos que la aguja de una jeringuilla. Esto ha hecho saltar las alarmas y preocupaciones en nosotros. ¿Se imaginan que alguno de nuestros alumnos se pinche con alguna jeringuilla, infectada por cualquier irresponsable? Supongo que se nos acusaría a nosotros directamente por negligencia y no estamos dispuestos a aceptar las culpas que no nos corresponden ya que lo que ocurre en el patio del colegio el fin de semana escapa a nuestras obligaciones y a nuestro control.

Consideramos que corresponde a la autoridad con competencias en este tema, y ustedes  se supone que lo son (y si no les tocará hacerlo saber a quienes corresponda), es a quienes les toca impedir que estas cosas pasen, por lo que lo ponemos en su conocimiento y les instamos a que pongan los medios para que exista la vigilancia adecuada y esto no pueda volver a ocurrir y, si el patio de recreo de nuestro colegio no puede ser utilizado por personas ajenas al colegio porque no saben respetarlo, tendrán que dejar de hacerlo y las autoridades tendrán que poner los medios para que así se haga (abrir otros espacios deportivos de uso popular para mayores en edad no escolar, subir las vallas del colegio lo suficiente para que no sea posible saltar sobre ellas,  vigilancia policial….)

Con esta misma fecha  hacemos publico en nuestra página web del colegio este escrito  para el conocimiento de los padres de nuestros alumnos y que sepan que nosotros hemos hecho lo que nos corresponde: comunicarlo a la ELA para que adopte las medidas oportunas para que sus hijos puedan jugar tranquilos en el patio de SU colegio.

Esperando una solución rápida y eficaz, le saluda cordialmente.»

El Director

Firmado: Bernardo Roa Guzmán